Te cuento la experiencia,
Querido amigo lector,
Trata de una chica
Y su extraño rumor.
Creencias quién,
Yo mismo ignoraba.
Hasta que una vez
Atónito quedaba.
Arreglé mis cosas y
Partí el camino.
Hacia la playa
El nuevo destino.
Sentí el atardecer,
Un solar abrigo,
Y el mar, me dió
Su cálido cobijo.
De pronto a lo lejos veo,
La silueta en el mar,
La sorpresa me delato,
Me quede sin hablar.
Rubia y Dulce,
Ella era hermosa,
Vestía de blanco,
El mar hecho diosa.
Luego me inquieto
Su alta mirada,
Era del verde más puro
Como una esmeralda.
Pensé que era un sueño,
¿Y como saberlo?,
Pero igual sus ojos
Me tenía perplejo.
Se sentía como ver,
El arco-íris condensado,
El amanecer en la pradera,
Y el sol deslumbrado.
Verde cristalino
Despliega su gasa,
De múltiples colores,
Y cósmica masa.
Veía como reflejaba,
Sus pupilas en mi visión,
Su encanto derretía
Mi humilde canción.
Desapareció
En el agua caminando,
Y cerré los ojos,
En ella pensando.
Y caí en su trampa,
En su gran paisaje,
No recuerdo nada ahora,
Solo aquel personaje.
Quién no quiera creer,
Esta en su derecho,
Solo espero que
Vivas tal hecho.
